El estudio de la pisada, también conocido como análisis de la marcha o estudio biomecánico, es un examen clínico esencial para evaluar la forma en que una persona camina. Este procedimiento tiene como objetivo identificar problemas relacionados con la posición y el funcionamiento de los pies y las piernas, y detectar desequilibrios o anomalías que puedan estar causando dolor o lesiones. Realizado por un podólogo, el análisis permite obtener información valiosa sobre la biomecánica del pie, lo que facilita un diagnóstico y tratamiento adecuado.

En el Centro Clínico del Pie, el estudio de la pisada se lleva a cabo en tres etapas detalladas para asegurar una evaluación completa y precisa:

1. Examen en Descarga del Paciente

En esta primera fase, el paciente se coloca en una camilla y se evalúan diversos aspectos del pie en reposo. El análisis incluye:

• Posición del pie en descarga: Se observa la forma de los arcos, el alineamiento del talón, la posición de los dedos y se buscan signos de deformidades, hinchazón o enrojecimiento.
• Palpación de puntos específicos: Se identifican áreas que podrían indicar molestias, proporcionando información valiosa para el diagnóstico.
• Valoración de las articulaciones y músculos: Se examinan la cadera, rodilla, tobillo y pie en busca de posibles limitaciones de movilidad o inestabilidad que puedan afectar el comportamiento de la marcha.
• Detección de puntos dolorosos: Se identifican los puntos que el paciente reporta como dolorosos, lo que ayuda a personalizar el diagnóstico.

2. Examen en Carga

En esta fase, el paciente se coloca de pie y se evalúa la posición del pie mientras soporta el peso corporal. Este examen se realiza para observar cómo el pie se adapta al peso y cómo se distribuye la presión en la planta del pie:

• Medición de áreas de carga y presión: Se utiliza la pedigrafía o el podoscopio para analizar las áreas de mayor presión y los puntos de apoyo del pie, proporcionando detalles precisos sobre la distribución del peso.
• Identificación de disimetrías: Se buscan posibles desviaciones en la carga y la posición del pie, lo que podría indicar problemas biomecánicos que necesitan corrección.
• Identificación de puntos dolorosos: Se registran los puntos de dolor adicionales que puedan surgir al estar de pie y soportar el peso.

3. Examen en Dinámica

El último paso del estudio se realiza mientras el paciente camina. En esta fase, se analiza el comportamiento global del miembro inferior durante la marcha, observando cómo se mueve el pie en relación con el resto del cuerpo. El análisis incluye:

• Valoración del movimiento del pie y la pierna: Se observa la dinámica completa del pie, cadera y rodilla al caminar.
• Evaluación de la función del miembro inferior: Se estudia el comportamiento y coordinación del miembro inferior para detectar cualquier anomalía en la marcha que pueda estar provocando incomodidad o lesiones.

Beneficios del Estudio de la Pisada en Podología

Con toda la información, se puede recomendar un tratamiento adecuado, como el uso de plantillas personalizadas, que pueden:

• Aliviar los síntomas causados por una mala alineación o pisada incorrecta.
• Mejorar la pisada y la distribución de la presión en el pie.
• Corregir deformidades que afecten la movilidad o causen dolor cuando son niños.

El uso de plantillas ortopédicas a medida es una solución eficaz para quienes padecen molestias relacionadas con la forma de caminar, ayudando a mejorar la comodidad y prevenir futuras lesiones. Este tratamiento está basado en la morfología específica del pie de cada paciente, garantizando un enfoque personalizado.

Importancia del Estudio de la Pisada para la Salud del Pie

El estudio biomecánico de la marcha es una herramienta clave para prevenir y tratar diversos problemas podológicos, como el dolor en los pies, las deformidades del pie (como el juanete o los dedos en martillo) y las lesiones deportivas. Un análisis adecuado permite a los podólogos ofrecer soluciones que mejoren la calidad de vida y la salud del pie de los pacientes. Si experimentas dolor o molestias al caminar, es recomendable consultar a un especialista en podología, quien podrá realizar un estudio completo y ofrecerte un tratamiento adecuado.